Martinetes del dos por cuatro. Entre la seriedad y la chufla.
De las causas que me ligan
a la tierra, a este planeta,
haré una lista completa.
Me la bufa lo que digan
los que al capital persigan.
Su persistente plegaria
a la diosa fiduciaria:
¡Qué rebose de dinero
mi vacío monedero
sin fatiga innecesaria!
En el amor todo arriesgo,
soy servidor de Cupido,
erótico y divertido.
Voy allá donde hallo riesgo
aun tomando incierto sesgo;
caigo de nonas a primas;
peregrino montes, simas,
guiado por el instinto
poco blanco y mucho tinto;
están claras mis estimas.
Los hijos son otro asunto,
Se los quiere, son la sangre,
Los traemos al palangre
de la vida y…¿les pregunto?
Nacen…. aquí están, y punto.
Desvelan días y noches
Entre cuentos y fantoches,
cariño, merienda, escuela,
crecen y la savia vuela,
despega, aquí no hay reproches.
La amistad es: los amigos,
aquellos que bien te quieren,
quienes queriéndote hieren,
juzgados de paz, testigos,
llaves maestras, postigos,
alianza horizontal
que no arrasa el vendaval.
La devoción, el afecto,
la seriedad, lo incorrecto,
en conexión transversal.
Comentarios
Una sonrisa, de una parte, por tu habitual fluidez y desparpajo en los versos.
Y una seria envidia por la persona que se trasluce en ellos.
Eres grande, amigo.
Salud, dinero y amor a raudales para ti.
Soy un hombre del montón
de la masa en rebeldía,
un tronco hundido en la arena,árbol de ramas caídas.
No es envidiable mi suerte
sino baza entretenida
en un juego que al azar
pierdo cartera y camisa.
Salud-
Enrique sin acceso al blog
que a la tierra ligarte ayudan
la del dicharachero ejercicio
de cantar contumaz el verbo
en esa tela de araña
donde tejes con esmero
¡Ay, Kike, me cuesta seguir tu desparpajo, pero ahí va, mi modesta réplica !
Abrazos
Merce
es algo consustancial
una cuestión natural,
rollo de seco estropajo,
me cuesta poco trabajo.
Pienso las rimas en ocho
sílabas y algún bizcocho
entre ellas se me cuela;
es el dolor que me amuela
que tengo el ánimo pocho.
La verdad es que yo me dejo llevar y así salen.
Un fuerte abrazo.
¡vaya con la "naturaleza": a unos dando tanto y a otros dejándonos con las ganitas! je je
Pues yo, cuando "me dejo llevar" como dices tú, sólo consigo pegarme "un batacaso" de narices...
Pero enfín! seguiré visitandote, para disfrutar y aprender
Abrazos
Merce
Amparo los martinetes son un cante flamenco que se entona y se interpreta al compás del martillo: es un cante de los llamados mineros o de fragua.
y el dos por cuatro es comprensible es el ritmo más adecuado para forjar el hierro.
Un abrazo y ahora leo lo de la radio.
Un abrazo