Borrador de sol y luna. A Miquel.
Medidas del universo
en una sola jornada,
un minuto cierra el Mundo,
solas las horas abarcan.
La ilusión muestra imprecisa,
puntos, de incierta importancia,
confusos, que se distinguen
en la noche barbicana.
El rocío de unos labios,
venas que precipitaran,
un vaho azul de misterios
en la inocencia de escarcha.
Sereno de soledades
en precipicios de llamas
tras los yermos y ateridos
encierros en que se atrapan.
El silencio es una esponja
donde se destierra el agua
sumergida en perezosos
soliloquios de nostalgias.
La voz que ya no se escucha
desde el pasado se alza
detenida entre tristezas
pedigüeñas de esperanzas.
Pregón de un abril distinto
mascullado en las palabras
que asoman una tras otra
en un precinto de zarzas.
El olvido es la quimera
del tiempo que en añagazas
vuelve una y otra vez
sobre artificios de nada.
El límite, no es extraño,
busca la verdad exacta,
mas no llega a parte alguna,
es su fin y aquí se acaba.
en una sola jornada,
un minuto cierra el Mundo,
solas las horas abarcan.
La ilusión muestra imprecisa,
puntos, de incierta importancia,
confusos, que se distinguen
en la noche barbicana.
El rocío de unos labios,
venas que precipitaran,
un vaho azul de misterios
en la inocencia de escarcha.
Sereno de soledades
en precipicios de llamas
tras los yermos y ateridos
encierros en que se atrapan.
El silencio es una esponja
donde se destierra el agua
sumergida en perezosos
soliloquios de nostalgias.
La voz que ya no se escucha
desde el pasado se alza
detenida entre tristezas
pedigüeñas de esperanzas.
Pregón de un abril distinto
mascullado en las palabras
que asoman una tras otra
en un precinto de zarzas.
El olvido es la quimera
del tiempo que en añagazas
vuelve una y otra vez
sobre artificios de nada.
El límite, no es extraño,
busca la verdad exacta,
mas no llega a parte alguna,
es su fin y aquí se acaba.
Comentarios
Tristemente bello.
El tiempo se cierra y deja dentro unos pocos puntos imprecisos, misteriosos, plenos, limpios, ardientes, silenciosos...
Tristeza -dices bien- pedigüeña de esperanzas.
La verdad del límite es esa:
quedarse en límite.
El resto es hacia atrás recuerdo, hacia delante esperanza.
Abrazos.
En el fondo del pozo.
Al fondo del pozo que es mi mente
que me lleva a cabalgar por las praderas
de montañas que no existen.
A ese pozo donde no hay soga que me eleve,
a veces le agradezco
que en el fondo me deje.
Soy nostalgico y silencioso, no lo puedo evitar.
Saludos renovados.
Un abrazo
Miquel, me inspiró ese reloj de sol que fotografías en tu blog, recordé que yo paso casi todos los días por delante de un reloj de sol y que ya escribí una décima sobre eso.
Sofía, lo mismo digo, me gustaron tus poemas.
Tempero, el silencio percibido como un atrapa ruidos.
Virgi, el silencio es una buena compañía.
Gracias por vuestra visita.