Pausas y licencias.
Tomé el vino de tus labios rojos
en la espléndida tarde incombustible,
bajo el sol aterido del invierno
con un beso fugaz, vibrante y triste.
Enredé en los espacios y las sombras
entre abrazos de arena y tus mohines;
presencié, azabache, mi aislamiento
de este antiguo pesar que se repite.
Derroté en mis trastornos la manía,
acertada a vencer por lo terrible.
Disfruté en una pausa malograda
tu altanero rubor que hoy me persigue .
Sometí mi razón a tus caprichos
cotidianos y espesos, siendo firme,
solo encuentro aparejos destrozados
y un paisaje lunar: mis cicatrices.
Comentarios
FELIZ NAVIDAD, ENRIQUE
Esperemos la lenta resurrección del reflejo del satélite al tiempo que la luz solar se va alargando a partir de hoy hasta la primavera.
Un fuerte abrazo.
Que tengas un año prolífico y feliz.
Un abrazo
Un abrazo, Kike
Merce
Almena: Feliz Navidad también para ti.
Ybris: La luz y la oscuridad son parte de un mismo sentir, las cicatrices y lo destruido no son si no la otra cara de la moneda de la realidad, ser feliz y pagarlo.
Amparo: siempre en la agónica esperanza del devenir cotidiano.
Merce: el dolor y el placer nos hacen que sepamos que estamos vivos.
Un fuerte abrazo y os deseo lo mejor, no pq sean navidades, que a mí ya me dicen poco o nada, os lo deseo como parte de la vida que os merecéis. Ser felices o intentarlo durante el tiempo que nos está permitido.