Adiós o hasta más ver.
Flores heladas de invierno
adornan tu corazón,
con tus palabras hirientes
haces presente el dolor.
Deja libre el pensamiento
rasgando la soledad,
no te quedes sin canciones
ni dejes tu voz quebrar.
Expresa tus emociones
quedo y solo, a viva voz,
no te evites los abrazos
que valoran la intención.
No permitas que el engaño
difumine la verdad
ni que los sueños terminen
poco antes de comenzar.
Entre los cristales rotos
y un humo gris, como no,
quedan viejas estaciones,
de hierro, a un paso veloz.
No te asustes si te digo
que no he podido olvidar
mas he de coser mi boca
con grapas de ruin metal.
No niegues que siempre he sido
marioneta de cartón
que con el alma de trapo
quise ser lobo feroz.
Valiera más que escusaras
este apetito voraz
que hace sangrar estos labios
que ya no te cantarán.
No es fácil constantemente
acostumbrarse al adiós,
sí un títere soy, sé que ahora,
se terminó esta función.
adornan tu corazón,
con tus palabras hirientes
haces presente el dolor.
Deja libre el pensamiento
rasgando la soledad,
no te quedes sin canciones
ni dejes tu voz quebrar.
Expresa tus emociones
quedo y solo, a viva voz,
no te evites los abrazos
que valoran la intención.
No permitas que el engaño
difumine la verdad
ni que los sueños terminen
poco antes de comenzar.
Entre los cristales rotos
y un humo gris, como no,
quedan viejas estaciones,
de hierro, a un paso veloz.
No te asustes si te digo
que no he podido olvidar
mas he de coser mi boca
con grapas de ruin metal.
No niegues que siempre he sido
marioneta de cartón
que con el alma de trapo
quise ser lobo feroz.
Valiera más que escusaras
este apetito voraz
que hace sangrar estos labios
que ya no te cantarán.
No es fácil constantemente
acostumbrarse al adiós,
sí un títere soy, sé que ahora,
se terminó esta función.
Comentarios
¿Por qué será que inspiran las páginas más bellas y sentidas?
Un abrazo.
Irse es dejar de molestar, la verdad.
Un abrazo.
Hablaba de mí mismo y de lo que yo pueda resultar molesto.
Y en esas andamos.
En demasiados sitios a la vez y más desubicado, eso me ocurre así que de algún lugar habré de marcharme. Quizá trasladé algún problema que sólo está en mi cabeza y que alcanzo yo nada más. Y ´ni así estoy seguro de ello.
un abrazo.
Volveré, como el agua por el cauce cuando llueve.
De momento me voy un ratito.
Salud.
Un abrazo bien grande
Así que no es un adiós sino un hasta luego.
Como dice Adolfo, un arevuaire lanzando el sombrero al aire.
Tengo muchos cuartos que ordenar.
Un abrazo fuerte.
Gracias.
¡Besos y salud titiritera a raudales !
Merce
Lo pasamos bien leyéndote. Sorpréndenos.
Un abrazo