Polvo somos
Apuestas por las causas impensables
igual que un marinero tierra adentro
asido al temporal y al desencuentro,
amigo de sujetos reciclables.
Opuesto a la orbital de respetables
trileros del honor que, en su epicentro,
se indignan pero salen a tu encuentro
en un juego a las causa más probables.
Prosigue el molinete de su rueda
banal, de los sujetos a demora,
sin otra devoción que su moneda.
Llegado es el momento a exacta hora
y no es sino serrín lo que al fin queda:
ceniza de melón que no enamora.
igual que un marinero tierra adentro
asido al temporal y al desencuentro,
amigo de sujetos reciclables.
Opuesto a la orbital de respetables
trileros del honor que, en su epicentro,
se indignan pero salen a tu encuentro
en un juego a las causa más probables.
Prosigue el molinete de su rueda
banal, de los sujetos a demora,
sin otra devoción que su moneda.
Llegado es el momento a exacta hora
y no es sino serrín lo que al fin queda:
ceniza de melón que no enamora.
Comentarios
Pero, mientras somos polvo palpable que deja huellas y afecta a los demás, habrá que ignorar a todos los falsamente indignados trileros del honor que se hacen presentes sin ser llamados.
Seguramente porque no hay en ellos otra devoción que su moneda ni otro residuo que el serrín o la ceniza.
Con honda las disparas, amigo.
Y pones a tus proyectiles un ritmo y una rima de sonetos que no se merecen esos "respetables".
Un abrazo.
claro que lo del "melón", como que le da consistencia al serrín jeje
Un abrazo, kike
Merce
me ocurre que sin saber
porqué, entro en un estado
de desesperación tranquila,
como si estuviera
esperando la nada.
Un trabalenguas mental.
Falta de ilusión, dirían unos.
Depresión, añadirían otros.
No creo en nada de eso.
Simplemente es que me cuesta
creer en algo...
A veces... Miquel
Hay tantas!
(Te estabas volviendo vago otra vez)
Moltes gracies Miquel.
Melones los hay a montones. Merce, tú tienes uno que te persigue.
Amparo, soy vago no lo olvides.
Miquel el próximo va por estos versos tuyos.