Paseo por la ciudad.
Arcángeles de tiza y purpurina
imitan los asuntos de los dioses
en círculos humanos, tras sus poses,
de asfalto, minifalda y gasolina.
La prisa ciudadana, en la retina,
ahíta de labor, rutina y toses.
Apuesta capturada sólo a doses,
la banca siempre gana y los domina.
El hielo de este ron tiene trabajo:
la calle cenicienta es puro fuego
en cada resistencia inesperada.
Demonios que reciclan a destajo,
palabras de cartón, -ingrato juego-,
en esta persistente mascarada
imitan los asuntos de los dioses
en círculos humanos, tras sus poses,
de asfalto, minifalda y gasolina.
La prisa ciudadana, en la retina,
ahíta de labor, rutina y toses.
Apuesta capturada sólo a doses,
la banca siempre gana y los domina.
El hielo de este ron tiene trabajo:
la calle cenicienta es puro fuego
en cada resistencia inesperada.
Demonios que reciclan a destajo,
palabras de cartón, -ingrato juego-,
en esta persistente mascarada
Comentarios
En ese pasajero bregar nos debatimos entre hondura y mascarada.
Excelente y ágil soneto, Kike.
Sigues manteniéndote en forma.
París te sienta bien.
Abrazos.
un abrazo
Muchas gracias. A los dos.
Enrique ¿te vienes a Zaragoza? II Encuentro poesía en la Red, 20 de marzo.
Un abrazo.
Jesús, siento mucho no poder asistir al encuentro.
Perlita, muchas gracias.
Tu ciudad está bien definida, mascarada pura la de la gran mayoría, títeres todos en manos de la ususra.
Besitos getafeños: PAQUITA
Es que se extraña ese tinte socarrón, agudo, sereno, humorista, que le das a las cosas.
Y esos arcángeles te han quedado geniales con sus atributos.
Besos y besos