Sopa de palabras.
Era que se era un pájaro herido
rotas sus dos alas que ya no son sueños
sino dos secciones de un gran almacén.
Dijo una señora: “¡que te vaya bien!
en eso que pones tan grandes empeños,
se te ve tan joven y estás tan perdido.”
Ella se decía… esto es otra historia,
no muy diferente sino comparable;
opuesta en su seno, reglada al contrario.
Ayer he comprado cierto diccionario
que no aclara nada ni es un incunable
de pequeñas citas faltas de memoria.
Por la barbacana pasa tanta gente
que estoy decidido a contar de nuevo
lo que ayer contaba de un modo distinto.
De tigre furioso me queda el instinto,
mas por ser humano, discorde, me muevo
tengo muchas ganas, lo sé, últimamente.
Un resto me resta de rastro rebelde
travieso y revuelto, amotinador,
animoso y lábil, terco y turbulento
Soy un torbellino, amarrado al viento,
que no echa en olvido ser agitador,
no esperando apenas que el seso se suelde.
Con cada palabra voy soltando lastre,
me digo a mí mismo que soy jacobino.
Ando desde Jauja a las insurgencias,
me dejan al fresco tontas conveniencias
No quiero la gloria, ni renuncio al vino
aun cuando en sus vasos me lleve al arrastre.
Siendo un insumiso indisciplinado,
gato malmandado, un loro salvaje,
el recalcitrante más incorregible,
loco refractario, poeta ilegible,
potro desbocado, barco a la deriva,
contumaz, indócil pero no malvado.
Tenaz porfiado como Polifemo,
astuto y ladino como un Odiseo,
algo marrullero por lo tortuoso,
cuco y obstinado, relapso y jocoso,
crédulo intermedio de aquello que veo;
harto de encontrarme tanto insulso y memo.
Ya vuelvo al principio que no conté el cuento
me dio como siempre al paso otra idea,
cambié lo pensado por otro supuesto,
si no es un orgullo tampoco es molesto,
soy todo terreno, hago lo que sea;
así son las cosas de cada momento.
rotas sus dos alas que ya no son sueños
sino dos secciones de un gran almacén.
Dijo una señora: “¡que te vaya bien!
en eso que pones tan grandes empeños,
se te ve tan joven y estás tan perdido.”
Ella se decía… esto es otra historia,
no muy diferente sino comparable;
opuesta en su seno, reglada al contrario.
Ayer he comprado cierto diccionario
que no aclara nada ni es un incunable
de pequeñas citas faltas de memoria.
Por la barbacana pasa tanta gente
que estoy decidido a contar de nuevo
lo que ayer contaba de un modo distinto.
De tigre furioso me queda el instinto,
mas por ser humano, discorde, me muevo
tengo muchas ganas, lo sé, últimamente.
Un resto me resta de rastro rebelde
travieso y revuelto, amotinador,
animoso y lábil, terco y turbulento
Soy un torbellino, amarrado al viento,
que no echa en olvido ser agitador,
no esperando apenas que el seso se suelde.
Con cada palabra voy soltando lastre,
me digo a mí mismo que soy jacobino.
Ando desde Jauja a las insurgencias,
me dejan al fresco tontas conveniencias
No quiero la gloria, ni renuncio al vino
aun cuando en sus vasos me lleve al arrastre.
Siendo un insumiso indisciplinado,
gato malmandado, un loro salvaje,
el recalcitrante más incorregible,
loco refractario, poeta ilegible,
potro desbocado, barco a la deriva,
contumaz, indócil pero no malvado.
Tenaz porfiado como Polifemo,
astuto y ladino como un Odiseo,
algo marrullero por lo tortuoso,
cuco y obstinado, relapso y jocoso,
crédulo intermedio de aquello que veo;
harto de encontrarme tanto insulso y memo.
Ya vuelvo al principio que no conté el cuento
me dio como siempre al paso otra idea,
cambié lo pensado por otro supuesto,
si no es un orgullo tampoco es molesto,
soy todo terreno, hago lo que sea;
así son las cosas de cada momento.
Comentarios
Cuidate...
Ese es nuestro orgullo.
No hay mejor sopa de palabras.
Abrazos.
Saludos.
Saludos
con alma de analogías
sazonada de utopías:
su aroma por los pasillos
con sabor de tres visillos
de fonda vieja y ajada,
las prisas de madrugada
y unos gemidos ahogados,
besos mohines y enfados,
café con leche y tostadas.
Saludos Alma.
PUES SÍ, HAY BASTANTE INSULS@ y mem@ arrastrándose por el mundo. Besos abrazados. PAQUITA