A un poeta amigo que a mí nunca me pidió dinero. Personajes complutenses.

Sablista titular y catedrático
lumínico y genial con mando en plaza,
bacante que se apuesta cada baza
en un juego vital y morganático.


Bohemio y trotamundos mayestático,
bribón decente en usos de su raza.
Poeta de talento y pan de hogaza,
vacía tus bolsillos y es simpático.


Afable en su ademán de caballero,
resuelto, con su verso desgarrado,
vicario de la vida y buhonero.


Adicto a algún soneto descarnado.
Tú préstale sereno tu dinero:
en un viento los dos habrán volado.

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